Install Steam
login
|
language
简体中文 (Simplified Chinese)
繁體中文 (Traditional Chinese)
日本語 (Japanese)
한국어 (Korean)
ไทย (Thai)
Български (Bulgarian)
Čeština (Czech)
Dansk (Danish)
Deutsch (German)
Español - España (Spanish - Spain)
Español - Latinoamérica (Spanish - Latin America)
Ελληνικά (Greek)
Français (French)
Italiano (Italian)
Bahasa Indonesia (Indonesian)
Magyar (Hungarian)
Nederlands (Dutch)
Norsk (Norwegian)
Polski (Polish)
Português (Portuguese - Portugal)
Português - Brasil (Portuguese - Brazil)
Română (Romanian)
Русский (Russian)
Suomi (Finnish)
Svenska (Swedish)
Türkçe (Turkish)
Tiếng Việt (Vietnamese)
Українська (Ukrainian)
Report a translation problem
Dificultad: Media
Tiempo total
1 h 10 m
Elaboración
30 m
Cocción
40 m
Reposo
2 h
Yo he usado pulpo ya cocido para facilitar la tarea y ahorrar más trabajo, -y porque no tenía cerca buen pulpo fresco-, pero si lo compráis fresco lo primero será cocerlo hasta dejarlo bien tierno.
Picar las cebolletas en cubos pequeños o en juliana fina, o usar una cebolla grande, y picar el pimiento si se usa. Calentar el aceite de oliva en una sartén y pochar las verduras a fuego medio con una pizca de sal, hasta que estén muy tiernas. Mientras, cortar el pulpo en piezas no muy grandes, pero tampoco excesivamente picadas.
Echar una cucharadita de pimentón a la sartén, remover bien y añadir el pulpo. Cocinar removiendo unos pocos minutos, ya que el pulpo está cocido y no necesita más que impregnarse con los sabores.** Retirar a un colador** sobre un recipiente y escurrir bien el aceite. Coger 100 ml y dejar escurriendo el relleno, tapado.
Estoy muy a favor de hacer citas con uno mismo y cocinarse rico y tomar un buen vino. Bueno, este plato de cazuela de marisco es ideal para eso. Van a ver que si lo hacen se van a querer pedir casamiento, recitarse poemas de amor y un montón de cosas más! Lo que digo es que la cazuela de mariscos es para ocasiones especiales porque ya quisiera comer todos los días frutos de mar, pero bien sabemos que no hay bolsillo que aguante! Pero, los gustos hay que dárselos en vida señores. Así que qué mejor que demostrarnos cariño con este plato que es todo lo que está bien en el mundo!